La importancia del porqué enseñar la lengua española y como llegarle al estudiante para que la vea importante, abarca varios puntos que denotan un alto intelecto tanto para su vida profesional como social. El lenguaje es un medio de comunicación que sirve como instrumento para la formación integral del ser humano, pues regula el pensamiento y por ende su conducta. Incentivar motivación en aquéllos aprendices de la lengua al concienciar la riqueza y variedad de la expresión dialectal como proceso de aprendizaje indispensable en su vida social y cultural, ya que permite la participación y desenvolvimiento expresivo en sociedad permitiendo opinar tanto como aportar.
La competencia lingüística crece gracias a las relaciones interpersonales y, para enseñar, no basta con saber la asignatura, es necesario el saber cómo emplear metodologías que motiven al educando a familiarizarse con lo aprendido, comprendiendo que lo recibido y asimilado tiene sentido y es útil para su futuro profesional. Con obligar al estudiante a sumergirse en la lectura no se obtienen buenos resultados, el arte no se puede imponer; para esto son recomendables las lecturas opcionales y atractivas bajo la revisión del docente, entendiendo que adquirir el hábito de la lectura crea en la personalidad de cada ser madurez intelectual, psicológica y ética. Lecturas constantes para la vida y no para el momento y la práctica de crear redacciones o creaciones de texto, aumenta el vocabulario para una amena expresión.
La competencia lingüística crece gracias a las relaciones interpersonales y, para enseñar, no basta con saber la asignatura, es necesario el saber cómo emplear metodologías que motiven al educando a familiarizarse con lo aprendido, comprendiendo que lo recibido y asimilado tiene sentido y es útil para su futuro profesional. Con obligar al estudiante a sumergirse en la lectura no se obtienen buenos resultados, el arte no se puede imponer; para esto son recomendables las lecturas opcionales y atractivas bajo la revisión del docente, entendiendo que adquirir el hábito de la lectura crea en la personalidad de cada ser madurez intelectual, psicológica y ética. Lecturas constantes para la vida y no para el momento y la práctica de crear redacciones o creaciones de texto, aumenta el vocabulario para una amena expresión.
El arte de ser lectores activos nos propicia buen intelecto para desenvolvernos en el diálogo con los demás pares, así pues, adquirir la habilidad de leer diario nos abre la puerta al mundo del saber, tanto para informarnos como para aportar nuestra opinión basado en un análisis crítico.
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